¿Te planteaste alguna vez estudiar y trabajar al mismo tiempo? Si es así, sabrás que se trata de un desafío que exige mucha organización, disciplina y motivación. Pero también tiene muchas ventajas, como adquirir experiencia laboral, mejorar tu currículum, generar ingresos y desarrollar habilidades útiles para tu futuro profesional.
Sin embargo, para lograr combinar estudio y trabajo con éxito, no alcanza con tener buenas intenciones. Es necesario seguir algunas estrategias que te ayuden a optimizar tu tiempo, energía y recursos. Acá te compartimos algunas de las más efectivas:
Sé consciente de la dificultad. Si tu ritmo de vida te lleva a tener que combinar estudios con trabajo, es imprescindible que seas consciente de que el reto requiere voluntad y esfuerzo. No es, en ningún caso, un reto inalcanzable. Pero para conseguir un buen rendimiento en ambos ámbitos, tenés que afrontar la situación con máxima motivación y autoexigencia.
Planificá tu agenda con anticipación. Establecé tus prioridades, tus objetivos y plazos. Asigná un tiempo adecuado para cada actividad, tanto académica como laboral, y respetá tu horario. Usá herramientas como calendarios, agendas o aplicaciones que te faciliten la organización y el seguimiento de tus tareas.
Aprovechá las ventajas de la modalidad online. Si podés elegir, optá por estudiar a distancia o de forma semipresencial. Así ahorrarás tiempo y dinero en desplazamientos, y podrás adaptar tu ritmo de estudio a tu disponibilidad. Además, tendrás acceso a recursos digitales que complementen tu aprendizaje.
Distribuí bien tu tiempo. Tené en cuenta la distribución del tiempo de estudio diario. Lo más aconsejable es destinarle aproximadamente una o dos horas. No te conviene estudiar más de tres horas seguidas, ya que tu rendimiento y concentración disminuirán. Es mejor hacer pausas frecuentes y breves que estudiar sin descanso.
Centrate en lo importante. Cuando estudies o trabajes, evitá las distracciones y concentráte en lo que estás haciendo. Apagá el celular, cerrá las redes sociales y elegí un lugar tranquilo y cómodo para trabajar. Así podrás rendir más y mejor en menos tiempo.
No te olvides de descansar y cuidarte. Estudiar y trabajar al mismo tiempo puede ser agotador, tanto física como mentalmente. Por eso, es fundamental que dediques tiempo a tu salud y a tu bienestar. Dormí lo suficiente, alimentáte bien, hidratáte, hacé ejercicio y practicá alguna actividad que te relaje y te divierta. Así podrás recargar tus energías y mantener tu ánimo.
Buscá apoyo y consejo. No estás solo en esta aventura. Podés contar con el apoyo y el consejo de tu familia, tus amigos, tus compañeros, tus profesores y tus jefes. Ellos te pueden ayudar a resolver dudas, a superar dificultades, a motivarte y a celebrar tus logros. También podés buscar mentores o referentes que hayan pasado por la misma situación y que te inspiren con su ejemplo.
Valorá tu esfuerzo y tu progreso. Estudiar y trabajar al mismo tiempo es una gran oportunidad de crecimiento personal y profesional. No dejes que los obstáculos o los fracasos te desanimen. Reconocé tu esfuerzo, tu dedicación y tu capacidad. Celebrá tus avances, tus aprendizajes y tus resultados. Y recordá que todo lo que estás haciendo tiene un propósito y una recompensa.
Estas son algunas de las estrategias que te pueden ayudar a combinar estudio y trabajo con éxito. ¿Te animás a intentarlo?